Descubre los 8 pasos fundamentales para crear un ecommerce de éxito. Desde definir tu propuesta de valor hasta analizar y mejorar tu tienda online.
1. Define tu propuesta de valor
Este paso consiste en explicar qué es lo que ofreces a tus clientes, cómo lo haces y por qué eres diferente de tu competencia. Tu propuesta de valor debe ser clara, concisa y convincente, y debe responder a las necesidades o deseos de tu público objetivo. Por ejemplo, si vendes zapatos online, tu propuesta de valor podría ser: “Ofrecemos zapatos de calidad, cómodos y personalizados, con envío gratuito y devolución garantizada”
2. Elige tu nicho de mercado
Este paso consiste en segmentar tu mercado potencial y enfocarte en un grupo específico de clientes que tengan interés y capacidad de compra de tu producto o servicio. Tu nicho de mercado debe ser lo suficientemente amplio como para tener demanda, pero lo suficientemente estrecho como para tener poca competencia. Por ejemplo, si vendes zapatos online, tu nicho de mercado podría ser: “Mujeres entre 25 y 45 años que buscan zapatos originales y exclusivos”
3. Selecciona tu producto o servicio
Este paso consiste en elegir el producto o servicio que vas a vender en tu ecommerce, teniendo en cuenta la demanda, la rentabilidad, la competencia y la logística. Tu producto o servicio debe ser de calidad, aportar valor a tus clientes y diferenciarse de los demás. Por ejemplo, si vendes zapatos online, tu producto podría ser: “Zapatos hechos a mano con materiales ecológicos y diseños únicos”
4. Crea tu marca
Este paso consiste en diseñar el nombre, el logo, el slogan y la identidad visual de tu ecommerce, que reflejen tu propuesta de valor y te posicionen en la mente de tus clientes. Tu marca debe ser memorable, atractiva y coherente con tu imagen y personalidad. Por ejemplo, si vendes zapatos online, tu marca podría ser: “Zapatico: zapatos con alma”.
5. Diseña tu tienda online
Este paso consiste en crear tu página web o tu aplicación móvil donde vas a vender tu producto o servicio, usando una plataforma especializada en ecommerce, como Tiendanube1 o Shopify2. Debes cuidar el diseño, la usabilidad, la seguridad y la optimización de tu tienda online. Tu tienda online debe ser fácil de navegar, rápida de cargar, segura de comprar y adaptada a todos los dispositivos. Por ejemplo, si vendes zapatos online, tu tienda online podría tener las siguientes secciones: inicio, catálogo, carrito, pago, contacto y blog.
6. Promociona tu ecommerce
Este paso consiste en difundir tu ecommerce para atraer visitas y conversiones, usando diferentes estrategias de marketing digital, como el posicionamiento web (SEO), la publicidad online (SEM), el email marketing3, las redes sociales4 o el marketing de contenidos5. Debes definir tus objetivos, tu público objetivo, tu presupuesto y tus canales de comunicación. Tu promoción debe ser creativa, relevante y orientada a la acción. Por ejemplo, si vendes zapatos online, podrías crear una campaña de email marketing con el asunto: “Descubre los nuevos zapatos que te harán sentir única”.
7. Gestiona tu ecommerce
Este paso consiste en administrar los aspectos operativos y logísticos de tu ecommerce, como el procesamiento de pedidos, el envío de productos, la atención al cliente, el control de inventario o la facturación. Debes establecer unos procesos eficientes, unos proveedores fiables y unos sistemas automatizados. Tu gestión debe ser ágil, precisa y satisfactoria para tus clientes. Por ejemplo, si vendes zapatos online, podrías ofrecer varias opciones de pago (tarjeta, PayPal), varios métodos de envío (correos, mensajería) y varias políticas de devolución (plazo, condiciones).
8. Analiza y mejora tu ecommerce
Este paso consiste en medir los resultados y el rendimiento de tu ecommerce, usando herramientas de análisis web, como Google Analytics o Hotjar. Debes identificar las métricas clave (KPI) que te permitan evaluar el éxito de tu ecommerce, como el tráfico web, la tasa de conversión, el valor medio del pedido o el beneficio neto. Tu análisis debe ser constante, objetivo y orientado a la mejora. Por ejemplo, si vendes zapatos online, podrías usar Google Analytics para conocer el comportamiento de tus visitantes, como las páginas más visitadas, el tiempo de permanencia o la tasa de rebote.